José Agustín Arrieta, 1803-1874

José Agustín Arrieta nació el 29 de agosto de 1803 en Santa Ana Chiautempan, Tlaxcala, México. Fue un pintor costumbrista que se destacó por retratar escenas de la Puebla decimonónica, ciudad en la que vivió toda su vida.

Fue hijo de Tomás Arrieta, de origen vasco, y de Rita María Fernández, quienes se mudaron a Puebla cuando José Agustín contaba con cuatro años de edad y donde permanecería toda su vida. Desde muy joven inició sus estudios en la Academia de Bellas Artes de Puebla, su aprendizaje estuvo a cargo de pintores de reconocido prestigio artístico y social en Puebla como Julián Ordóñez, Lorenzo Zendejas, Salvador del Huerto, los hermanos Caro y José Manzo, entre otros. En la Academia obtuvo la habilidad para el dibujo, la facilidad para las composiciones y los conocimientos anatómicos para la construcción de retratos.

De sus primeros años datan una colección de estampas en las que se ilustran diversas maquinarias industriales. Posteriormente realizó algunos retratos entre los que destaca uno del general Ignacio Zaragoza, así como algunos cuadros religiosos. Arrieta abandonó las cuestiones académicas y optó por retratar la realidad de la época, a partir de ahí fue cuando produjo escenas de carácter costumbrista y sus tan ahora valorados bodegones, adquirió fama por sus pinturas de "chinas poblanas" y presentó sus obras en diversas exposiciones; en 1850 en la Academia Nacional de San Carlos y en la de Puebla en los años 1851, 1853 y 1855.

Arrieta permaneció indiferente ante la pintura de paisaje, género que en aquella época enseñaba el italiano Eugenio Landesio en la Academia de San Carlos y cuyo mayor representante fue José María Velasco. En cambio, se le conoce por la predilección que tenía ante el bodegón, un género lleno de simbolismos y muy común en el siglo XVII, y que luego pasó al siglo XVIII como una simple representación del natural. La Academia de San Carlos ni siquiera se preocupó por incluirlo como asignatura o algo digno de enseñar, pero Arrieta se dedicó a revalorizar el género empleando los enseres que se emplean particularmente en la cocina poblana y los exóticos alimentos mexicanos.

La singularidad en la obra de Arrieta es el reflejo de las costumbres de la vida cotidiana en la Puebla del siglo XIX: los diversos tipos de vestimenta, gastronomía, oficios, además de virtudes y defectos, elementos que destacaron y se repitieron a lo lardo de su quehacer artístico.A través de su obra se puede reconocer a diversos personajes que componían el tejido social de la época como el llamado chinaco, la china poblana, el soldado, el aguador, el clérigo, el caballero y el mendigo, entre muchos otros.

Arrieta nació en una época marcada por el movimiento independentista, el cual se vio reflejado en obras donde retrató a los mexicanos de las calles y las haciendas, quienes constituían un México mestizo, único, que se desarrollaba de manera desigual y combinada. Además, Arrieta halló una particular fascinación por las escenas cotidianas esto puede verse en Tertulia de pulquería (obra perteneciente a la Colección Blaisten). Otros cuadros costumbristas de igual fama son La sorpresa, La cocina poblana, Vendedores de horchata y Agualojera.

José Agustín Arrieta murió en la ciudad de Puebla el 22 de diciembre de 1874. A este gran pintor mexicano, pionero de la escuela nacionalista, lo rescató José Luis Bello y Zetina en su libro Pinturas Poblanas que escribió en el año de 1943.